martes, 26 de junio de 2018

LA LLAMADA.

Hoy he leído "Incluso si tú llamases 2 años después a las 03:00 a.m....yo respondería"

Y no, ni fueron 2 años, ni llamaste, fueron unos 2 meses y algunos "like" cruzados los que rompieron esos muros de rencor y silencio que estúpidamente construimos.

¿Has visto alguna vez que ocurre en el desierto tras una tormenta de lluvia?

¿No?

Pues tienes que verlo, es algo precioso, con mucha magia.

Al día siguiente de caer la lluvia, donde antes no había más que arena, piedras y tierra seca, hay un montón de flores y alrededor de los riachuelos que se forman la vida surge.

Y es que resulta que esa vida siempre estuvo allí, nunca desapareció, quedó oculta entre las piedras, escondida bajo la arena esperando que la lluvia traiga el agua que la haga florecer, esperando el momento preciso...eso, "el momento".

Y veo que lo que hay entre nosotros, llámalo "X" estaba ahí y nunca se fue; aguantó los malos tiempos y los malos momentos soportando el sol del desierto y nada más la lluvia fresca lo mojó, floreció.

Porque resulta que las personas que se quieren de verdad, que se quieren bien, que se quieren bonito, nunca dejan de hacerlo porque aunque la vida, las circunstancias y casi siempre la estupidez hagan que dejes de estar enamorado, es muy difícil que dejes de querer, al menos entre personas especiales, de esas que más que personas son joyas que la vida te regala.

Es por esto que llames a la hora que llames, el tiempo que tardes en hacerlo y las veces que lo hagas...responderé.

P.D: aunque sea para un concierto horrible a cientos de kilómetros y comerme una hamburguesa mientras me pierdo en tu mirada.

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