ADICTO.

Me siento como un adicto en rehabilitación, como quien ha decidido liberarse de algo que lo está matando poco a poco, que no es bueno para él.

Hay sustancias que te dan minutos de felicidad, de placer, de risas y de hacerte volar por encima del mundo, pero a costa de resacas horribles, de noches temblando queriendo más, sintiendo el vacio, la necesidad y la ausencia de ellas....sindrome de abstinencia.

Y asi senti su amor, que me hizo el mas dichoso del mundo, me hizo creer capaz de comerme el mundo, de vivir una nueva vida, que me llenó de felicidad....de felicidad temporal.

Esnifé su risa, me fumé todas las miradas que me brindó con esos preciosos ojos que embrujan, me meti en vena todos sus besos, sus caricias y quise morir de sobredosis de sus ''te quiero''; mezclé el licor de su amor con pastillas  de la pasion que sentimos entre sábanas.

Como un yonki, un jodido yonki.

A cambio de dias geniales, de momentos inolvidables, de besos, caricias, miradas y sonrisas inigualables sufri dias de desasosiego, noches de insomnio, tardes enteras esperando una.llamada o un mensaje, de duchas apoyado contra la pared para que las lagrimas se mezclasen con el agua que no lograba limpiar esa sensación de mi alma.

Desengaños, dolor, frustración y en algun momento esa cruel sensación que nadie deberia sentir nunca, la sensacion de que tu todo no es suficiente.

A cambio de que?

De una felicidad virtual?

No, el negocio no es rentable.

Y ahora, una vez pasado el mono, una vez dejados atras los temblores, los gritos de rabia e impotencia, la fiebre, las nauseas, una vez dejado atras el infierno de la abstinencia toca limpiar el alma.

Borrar del organismo cualquier rastro de aquello que nos afectó de este modo, que nos hizo tan feliz por momentos y tan desdichados el resto de los dias.

Teniendo claro que eres un adicto y que no te puedes permitir el lujo de volver a las andadas o caerás otra vez y quizas no te recuperes y mueras en caso de sobredosis.

Limpiando.