Te quiero aunque no te lo diga ya, aunque tenga mi corazon arrestado, esposado y amordazado en la carcel en que se ha convertido mi pecho, para que no deje ver lo que muere por gritarle al mundo y a tu cara.
Te quiero y es como esa sensación de fiebre que hace que todo te duela, que tu temperatura sea alta, que tu piel arda de manera que todo lo que toca tu cuerpo te da frescor, que te da esa placentera sensacion de dormir despierto y desear disfrutarla en el sofa, con una buena manta y una mala pelicula.
Te quiero y casi siempre desearia no hacerlo todavía, pero no puedo, por mucho que frote mis manos no saco de ellas el tacto de tu piel, por mucho que rasque mi corazón no arranco de él todo el amor que me diste y por mucho que corte mis venas, mi sangre sigue llevando flotando en.ella pedazos de los besos que me diste.
Te quiero, aunque me de miedo tu reproche y esa cara de circunstancias si se me escapa y te lo digo
Y sé que tú también me quieres, como puedes, como te permites, que me quieres a tu manera y por eso mismo yo también te quiero, pero así, a mi manera, de esa manera que solo conozco cuando pienso en ti, vaciándome del todo, entregándome a tumba abierta, queriéndote de manera suicida sabiendo que la caída será muy dura.
Te quiero, aunque no quiera ni deba quererte.
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